Ya han sido cerca de 18 meses de trabajo para establecer un estándar de sustentabilidad para la industria de la ciruela deshidratada chilena. “Un periodo tremendamente colaborativo, con participación de unos 600 actores de la industria, no solo empresas y sus proveedores, sino entidades gubernamentales y académicas”, indica Karina Orellana, consultora del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA).

En este proyecto liderado por Chileprunes, Asociación Gremial de Procesadores y Exportadores de Ciruelas Secas de Chile, “se ha tenido una dinámica participativa desde el inicio de la construcción del estándar, lo que vale la pena destacar, así como el hecho de que estamos construyendo el primer estándar a nivel mundial para la ciruela deshidratada”, expresa la especialista.

En efecto, entre los beneficios de la certificación estará el ser una de las primeras empresas en el mundo, en recibir un certificado de sustentabilidad en el sector de la ciruela deshidratada. Algo relevante para los consumidores que buscan este tipo de productos, se interesan por su trazabilidad y el cumplimiento de estándares ESG.

Por otro lado, el estándar se plantea como una herramienta de gestión integral y flexible que guía a las empresas, en el corto, mediano y largo plazo, respecto a cómo avanzar en materia de sustentabilidad, indica Karina Orellana.

 

En etapa de Auditoría

El proyecto de 28 meses está dividido en 4 etapas: desarrollo del estándar, auditoría, capacitación y certificación.

Hasta la fecha se ha realizado un mapeo de actores; una encuesta de priorización de ámbitos (con masiva participación), la conformación de los estamentos de gobernanza, así como la entrega de dos estándares, uno ligado a la producción primaria en huerto, y otro, relacionado con el proceso agroindustrial, con énfasis en secado y tiernizado de la fruta.

“Desde junio de este año y hasta diciembre, se está en una segunda etapa que hemos llamado de pilotaje de Auditoría, identificando brechas técnicas de las dos etapas”, agrega Karina Orellana. En esta etapa de pilotaje se estarán visitando un total de 45 empresas, tanto de producción primaria (predios y huertos frutales), así como firmas agroindustriales, “viéndose una muy buena disposición a colaborar y alta participación”.

Paralelamente, se están realizando los últimos ajustes al estándar, detalles a mejorar como la redacción de las acciones, incorporando nuevos medios de verificación propuestos por otros actores, y que les permita mostrar sus avances en sustentabilidad.

Siguiendo con la agenda, se espera que a comienzos de 2024 se inicie el proceso de capacitación, y para ello, se va a generar una plataforma donde quedará alojado material para que cualquier empresa que quiera certificarse pueda tomar el material como referencia.

Las primeras empresas que estén buscando su certificación, tendrán el apoyo del equipo técnico que ha estado detrás de este proceso.

Junto a Chileprunes e IICA, el Comité Ejecutivo a cargo del “Diseño de un Estándar de Sustentabilidad para el Sector Agroindustrial de Ciruelas Deshidratadas”, lo conforman la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático (ASSC), la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), agencia del Ministerio de Agricultura, y la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA).

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